El cierre del sillín es un componente de la bicicleta que se encarga de sujetar el sillín a la tija del sillín. Está ubicado en la parte inferior del sillín y se conecta a la tija del sillín mediante una serie de pernos o tuercas. El cierre del sillín permite que el sillín se mueva hacia adelante y hacia atrás para ajustar la distancia al manubrio.

El cierre del sillín es una pieza importante porque permite que el ciclista ajuste la posición del sillín a su preferencia y a la longitud de sus piernas. Además, el cierre del sillín también puede jugar un papel en la comodidad del ciclista al sentarse en el sillín, ya que puede absorber parte del impacto durante la actividad.

Hay diferentes tipos de cierres de sillín disponibles en el mercado. Algunos están hechos de aleación de aluminio, mientras que otros están hechos de acero o titanio. Los cierres de sillín también vienen en diferentes tamaños y formas, y algunos tienen características adicionales como el ajuste de la inclinación del sillín o la amortiguación.